Si hay un mass media que ha notado especialmente la llegada de las plataformas sociales ese ha sido, sin duda, la televisión tradicional. Y no hablamos tanto en términos de audiencias sino, sobre todo, en términos de inversión publicitaria. Para las marcas, la televisión ha dejado de ser el medio rey en detrimento de las redes sociales que les permiten conectar con sus públicos de una manera mucho más cercana, original, versátil y económica.
Una de las consecuencias de este cambio de paradigma publicitario ha sido la aparición de nuevos agentes en el terreno de juego. Sin bien las marcas recurrían antes a prescriptores famosos para protagonizar sus anuncios televisivos (¿a que recuerdas a Jesús Puente y José Luis López Vázquez recomendando Atún Calvo?), la era digital ha hecho que las marcas acudan a influencers y embajadores para modificar los hábitos de compra.
¿Conoces las diferencias entre estos nuevos roles tan presentes en las estrategias de marketing digital de las marcas? Pues como expertos en la gestión de redes sociales, te las contamos aquí.
Influencer y embajador de marca: ¿son lo mismo?
Se trata de dos de los “nuevos roles digitales” que han venido asociados a la proliferación de blogs y perfiles personales en plataformas sociales. Muchos cometen el error de pensar que se trata del mismo tipo de persona, alguien “popular” con una legión de seguidores en las redes sociales. Pero las marcas que los contratan saben que son dos perfiles muy distintos como te vamos a explicar:
1.- Diferente notoriedad:
Influencer: Es una persona que ha ganado una gran popularidad y tiene un gran poder para influir en su entorno digital. Son personas que acumulan un gran número de seguidores en las redes sociales, generando reacciones, comentarios, shares y engagement entre quienes les siguen. Que anuncien/usen un producto es garantía de visibilidad del mismo por miles de personas.
Embajador: Es una persona anónima pero muy activa en redes sociales, capaz de tener su pequeña gran comunidad. Utiliza las redes para hablar de algo que le apasiona y para recomendar productos y servicios a sus seguidores, especialmente los relacionados con un ámbito que domina, normalmente por afición.
2.- Diferente relación con la marca:
Influencer: Es contratado por la marca para promocionar sus productos y servicios y darles una mayor visibilidad en redes sociales. En la mayoría de los casos, los influencers no están vinculados ni familiarizados con la marca. De hecho, suelen promocionar productos y servicios de distintas marcas, desde productos de belleza a restaurantes.
Embajador: Puede tratarse de un consumidor puntual, de un trabajador de la marca o de un comprador muy fiel y muy fan de una compañía. En cualquier caso, es una persona que conoce la marca, está familiarizado con ella y quiere recomendarla a otras personas por convicción, utilizando para ello sus perfiles sociales.
3.- Diferente duración de la colaboración con la marca:
Influencer: Realizan colaboraciones puntuales que suelen tener una duración determinada y que se especifica en un contrato (por campaña, por X número de posts…). En el caso de una campaña de producto o de una campaña promocional, es raro que la relación entre marca-influencer dure más de dos semanas.
Embajador: La relación no está sujeta a tiempos concretos y suele prolongarse de manera constante. De la misma forma que un embajador puede llevar tiempo recomendando una marca sin que esta lo sepa, convertirse en embajador no suele alterar este aspecto y lo más probable es que su relación se prolongue incluso años.
4.- Diferente credibilidad para la audiencia:
Influencer: La audiencia siente más interés por el propio influencer y por su vida que por los productos o servicios que recomienda en sus redes sociales. Además, el hecho de que puedan contratarlos por diferentes marcas, y un día promocionen relojes y otro día cremas faciales, les resta credibilidad, sin que por ello se pueda negar su gran capacidad para poner a la marca en el punto de mira de muchas personas.
Embajador: Como son personas realmente contentas con una marca, que comenzaron a recomendarla de manera desinteresada, sus testimonios se perciben como más naturales y creíbles, además de que se nota que son expertos en la materia. Por este motivo, aunque su capacidad de alcance sea menor, sus recomendaciones suelen tener más efecto, además de hacerlo dentro de una comunidad de potenciales consumidores como suelen ser sus seguidores.
¿Conocías las diferencias entre ambos roles dentro de las estrategias digitales que siguen las marcas hoy en día? Es importante que si quieres utilizar estos “nuevos prescriptores” primero te asesores y sepas qué le conviene más a tu marca o negocio. Para ello es importante saber a quién sigue el público al que te diriges y valorar la inversión que quieras destinar. Si quieres, en Positio podemos ayudarte a dar visibilidad a tus acciones en las plataformas sociales, ¡llámanos!