Ya sabes lo que proliferan los términos en inglés en el ámbito del marketing digital. Además, en la mayoría de las ocasiones, se utilizan para hacer referencia a una realidad que ya existía pero que, expresada así, se convierte en un fenómeno al que se presta más atención. Es lo que ocurre ahora con el thin content, un contenido a evitar del que hoy queremos hablarte.
Thin significa delgado en inglés. Una palabra que seguro conoces y habrás visto en infinidad de ocasiones, sobre todo en etiquetas de ropa. ¿Te haces una idea por dónde van los tiros cuando se aplica a los contenidos digitales, verdad? Efectivamente, el thin content es un contenido que aporta poco al usuario, un contenido pobre, ligero, delgado, que todas las marcas deberían evitar si quieren convertirse en referencia y autoridad sobre una materia.
Pero veamos más en profundidad qué es el thin content, cuáles son sus manifestaciones más habituales y algunos consejos para evitarlo.
¿Qué es el thin content?
Thin content es un tipo de contenido digital que aporta poco o ningún valor a los usuarios. Según el propio Google, “es un contenido de baja calidad en un sitio web” por ser un contenido vacío, obvio, sin chicha, que no da respuesta ni aporta nada a la intención de búsqueda del usuario. Vamos, para que nos entendamos, el thin content es paja.
Precisamente, cuando se lanzó el algoritmo Panda en 2011, uno de sus objetivos era penalizar ese contenido poco interesante o de baja calidad. E igualmente, la implementación de Freud Update en 2017 pretendía reforzar la persecución de este tipo de contenidos superfluos.
Por todo esto, evitar el thin content en tu página web o en tu blog no es algo que solo debas hacer para garantizar una buena estrategia de contenidos que haga que los usuarios te busquen (inbound marketing), sino que también es clave para mejorar el SEO y para evitar penalizaciones de Google que pueden afectar negativamente al posicionamiento de tu sitio. La mejor recomendación es tener siempre en cuenta las directrices básicas de la búsqueda de Google y respetarlas.
Tipos de thin content más comunes.
Aunque nadie en su sano juicio perdería el tiempo en crear un contenido que no aporta nada a sus usuarios, lo cierto es que es una práctica muy habitual. A veces, por falta de tiempo; a veces, por falta de recursos; otras veces, por falta de talento y otras muchas, por seguir generando contenido que alimente la estrategia SEO sin más.
Algunos de los thin contents o contenidos de nula aportación son:
- Los contenidos duplicados o copiados de otros sitios web.
- Los contenidos autogenerados (ojo aquí con la revolución del chat GTP).
- Los contenidos afiliados o de colaboraciones que no se revisan.
- Los contenidos de rellenos que no dan respuestas a las búsquedas de los usuarios.
Consejos para evitar el contenido thin
Pues el mejor consejo que podemos darte es que vengas a vernos. Somos una agencia de marketing digital (Madrid, Barcelona, Mallorca y Asturias) y contamos con un equipo de copys que generan contenido de calidad adaptado a tus objetivos digitales.
Creamos contenido pensando en los usuarios y no en los motores de búsqueda. Solo así se puede crear un contenido original que resulte útil, práctico y resuelva dudas o problemas a los usuarios, fin último de una estrategia de este tipo. Además, investigamos para incluir información siempre contrastada y actualizada para convertir tu sitio web en un espacio que despierte confianza y credibilidad.
Revisar constantemente tu estrategia de contenidos es otro consejo lave para evitar el temido thin content, que más allá de decepcionar a los usuarios que no encuentran nada de interés en él, puede perjudicar el posicionamiento de tu sitio web. Llámanos si estás interesado en descubrir más sobre nuestros planes de blogging y redes sociales.